Un buen truco para ensanchar pasillos o recibidores estrechos es elegir un papel pintado de rayas horizontales. Para hacer más acogedor el ambiente juega con dos tonos muy cálidos un crudo y un beige. Estos mismos colores se pueden repetir en las lámparas, en las tapicerías y en la alfombra, para lograr un recibidor bien coordinado.
Para no recargar el espacio puedes elegir una consola de líneas rectas, perfecta para recibidores estrechos. Otro recurso muy útil para ampliar visualmente el espacio es colocar un gran espejo sobre la consola.
Para aprovechar al máximo la luz natural que puede llegar desde otras estancias, las paredes pueden estar pintadas de un blanco roto o bien en un gris claro, y el suelo se puede cubrir con una alfombra clara. Las lámparas de sobremesa se necesitan para que no quede ningún rincón oscuro y de noche la iluminación sea más cálida.
Puedes optar por el papel pintado ¿Te da miedo decorar las paredes del recibidor porque crees que el resultado será recargado? No tengas miedo a probarlo. El secreto para acertar está en elegir unos motivos pequeños sobre una base clara, le darás un aire luminoso y fresco. Para acentuarlo más acompáñalo con muebles blancos de línea sencilla y unos cuadros haciendo composiciones, unas lámparas blancas o de tonos suaves harán del conjunto un recibidor con encanto.
Si el recibidor es amplio lo más práctico es contar con un buen armario ropero para guardar los abrigos y la ropa de calle. También puedes colocar una consola para dejar las cartas o las llaves y una butaca, banco o banqueta que no recargue el espacio. Pero si el recibidor es pequeño puedes optar por un perchero, una ligera consola o un estante volado y un espejo ayudará a ampliarlo.
Una buena idea para ceder luz natural a recibidores y pasillos es instalar puertas acristaladas en alguna habitación contigua.
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