Pintar es la manera más fácil y económica de renovar tu casa.
Dependiendo de la luz que tengas, elegirás el color. Si es mucha la luz que recibes podrás tener más libertad para elegir los colores, pero si tienes poca luz, opta por tonos claros, reflejarán hasta el 80% de la luz que recibe.
Lo que es seguro es que no te cansarás de un tono neutro para tus paredes, tampoco del gris claro, que es perfecto tanto en ambientes modernos como en otros más clásicos, y una tercera opción es el color arena, que tiene el equilibrio perfecto entre el ocre y el gris por eso combina con todo.
Pintar la casa toda del mismo color es una buena elección, parecerán todas las estancias un mismo espacio y dará sensación de amplitud y armonía. Además de resultar más económico, porque a más colores, más gasto y más probabilidad de desperdiciar pintura.
Si te has decidido por combinar varios colores en la misma estancia, existe una solución para lograr el equilibrio perfecto: el color dominante ocupará el 60% de la superficie y el otro 40% se repartirá entre 3 o 4 matices (en paredes, cortinas y detalles decorativos).
Distintos colores, distintos espacios:
- Para el salón: tonos cálidos.
- Para la cocina: rojos y naranjas.
- Para el dormitorio: grises, azules, verdes, tonos que ayuden a descansar.
- Para el baño: tonos que den claridad.
La pintura más económica es la pintura plástica al agua, de fácil aplicación y secado. Y dentro de las plásticas hay varios tipos. La más saludable es la ecológica, no emite ningún tipo de tóxicos al aire. Son más caras, pero son una inversión en salud, sobre todo para los niños.
Para la cocina utiliza las pinturas anti-manchas y para el techo elige siempre una pintura de acabado mate o satinado.
COLORES
Blanco: Potencia la luz y amplía el espacio, es ideal para estancias oscuras y habitaciones pequeñas.
Beige-Tostado: Es el color de la arena y las piedras, crea espacios muy naturales y a la vez elegantes y acogedores. Es ideal para dormitorios y salones.
Amarillo: Es un color cálido que crea espacios acogedores. No recarga la estancia y da protagonismo a los detalles. Se utiliza en las zonas de estudio o donde trabajes. Ideal para casas que estén en climas fríos.
Azul: Color frío que consigue refrescar los ambientes. Ideal para dormitorios, tiene efecto tranquilizador es perfecto para dormitorios infantiles.
Verde: Da frescor y sensación de la naturaleza, crean espacios sanos, se utiliza en espacios de descanso y relajación, en dormitorios.
Rosa: Delicado y romántico, llena los ambientes de alegría y frescor. Es ideal no solo para habitaciones infantiles, sino también para adultos porque facilita la relajación.
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